El leonés Jonathan Rodríguez es pionero en España de esta singular práctica deportiva que combina el ajedrez con el boxeo
El pasado 28 de noviembre el leonés Jonathan Rodríguez participaba en el Campeonato del Mundo de Chessboxing, un deporte que, como su propio nombre indica -en inglés-, mezcla boxeo y ajedrez y del que este leonés de 30 años es pionero a nivel nacional. El propio protagonista cuenta cómo comenzó a practicar esta modalidad deportiva, que «ya aparecía en películas de hace 30 ó 35 años».Fue un novelista alemán quien recuperó la práctica «recreándolo en un cómic». Años después, en 2003, vería la luz el primer Campeonato del Mundo de esta modalidad organizado por un holandés.
El formato del deporte es sencillo, explica Jonathan: «Se empieza jugando al ajedrez y luego sucesivamente se va intercambiando con el boxeo y así, hasta once asaltos». Las formas de ganar pueden ser por jaque mate o por K.O.. De no producirse ninguna de ellas, se recurriría a los puntos, al igual que ocurre en el boxeo.
El mejor combate, para la tele rusa
Explica este ex-boxeador profesional comenzó a practicar este deporte en 2009 «cuando me invitaron a un acto que se celebró en la Plaza Mayor de Salamanca». Desde entonces, los organizadores de este evento estuvieron detrás de él, aunque no ha sido hasta ahora cuando se ha animado a participar en un campeonato mundial.
La prueba se celebró en Moscú, donde el español peleó contra un alemán. Jonathan cayó derrotado en un combate en el que «arbitraba otro alemán», aunque -reconoce- ha vuelto a su tierra natal «orgulloso» de su papel y de haber sido elegido el mejor combate por parte de la televisión rusa.
Este leonés, que como boxeador llegó a ganar una medalla de plata y otra de bronce, empezará a partir de ahora a entrenar con la mirada puesta en el siguiente campeonato, que se celebrará «previsiblemente para el mes de abril». Para ello, y «ante la falta de apoyo institucional de aquí», se preparará en el Centro de Tecnificación de Berlín.
Una de las mayores dificultades de este deporte radica en pasar de la intensidad que requiere un combate a la calma de una partida de ajedrez. Por ello, recomienda «tener mucho equilibrio entre la frialdad y la pasividad». Aún así, reconoce que es inevitable que «haya errores más graves que los que suele haber en una partida de ajedrez normal».
Fuente: ABC
El pasado 28 de noviembre el leonés Jonathan Rodríguez participaba en el Campeonato del Mundo de Chessboxing, un deporte que, como su propio nombre indica -en inglés-, mezcla boxeo y ajedrez y del que este leonés de 30 años es pionero a nivel nacional. El propio protagonista cuenta cómo comenzó a practicar esta modalidad deportiva, que «ya aparecía en películas de hace 30 ó 35 años».Fue un novelista alemán quien recuperó la práctica «recreándolo en un cómic». Años después, en 2003, vería la luz el primer Campeonato del Mundo de esta modalidad organizado por un holandés.
El formato del deporte es sencillo, explica Jonathan: «Se empieza jugando al ajedrez y luego sucesivamente se va intercambiando con el boxeo y así, hasta once asaltos». Las formas de ganar pueden ser por jaque mate o por K.O.. De no producirse ninguna de ellas, se recurriría a los puntos, al igual que ocurre en el boxeo.
El mejor combate, para la tele rusa
Explica este ex-boxeador profesional comenzó a practicar este deporte en 2009 «cuando me invitaron a un acto que se celebró en la Plaza Mayor de Salamanca». Desde entonces, los organizadores de este evento estuvieron detrás de él, aunque no ha sido hasta ahora cuando se ha animado a participar en un campeonato mundial.
La prueba se celebró en Moscú, donde el español peleó contra un alemán. Jonathan cayó derrotado en un combate en el que «arbitraba otro alemán», aunque -reconoce- ha vuelto a su tierra natal «orgulloso» de su papel y de haber sido elegido el mejor combate por parte de la televisión rusa.
Este leonés, que como boxeador llegó a ganar una medalla de plata y otra de bronce, empezará a partir de ahora a entrenar con la mirada puesta en el siguiente campeonato, que se celebrará «previsiblemente para el mes de abril». Para ello, y «ante la falta de apoyo institucional de aquí», se preparará en el Centro de Tecnificación de Berlín.
Una de las mayores dificultades de este deporte radica en pasar de la intensidad que requiere un combate a la calma de una partida de ajedrez. Por ello, recomienda «tener mucho equilibrio entre la frialdad y la pasividad». Aún así, reconoce que es inevitable que «haya errores más graves que los que suele haber en una partida de ajedrez normal».
Fuente: ABC