Antonio LORCA
Manuel Bazán es en primer lugar un apasionado del ajedrez y, por accidente, el presidente de la Federación Asturiana de un deporte que tiene a la inteligencia como principal arma. Su pasión por el ajedrez le llegó cuando siguió un duelo que mantuvo al mundo en vilo, el que enfrentó al estadounidense Bobby Fischer con el ruso Boris Spassky. Más que la lucha por un título mundial aquello fue un episodio más de la Guerra Fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética. La afición le ha durado toda la vida y ahora este avilesino de 58 años trata de propagar las virtudes de una práctica cuyos beneficios no se ven a simple vista, pero que pueden ser más importantes que unos buenos abdominales. Bazán sueña con tener en un futuro un Gran Maestro asturiano, pero lo que más le preocupa es que los jóvenes se aficionen a este deporte, que solo exige tener en buena forma la mente, tengan dónde hacerlo y con quien.
-Mucha gente dice que sería un gran avance introducir el ajedrez en las escuelas ¿Que puede aportar este deporte a los niños?
-Es un deporte individual, en el que estás solo, que te aporta responsabilidad y valores que otros deportes no proporcionan. Les ayuda en los estudios, en las Matemáticas. Se está intentando que los estados miembros de la Unión Europea lo introduzcan. Una de las cuestiones importantes es tener a las personas idóneas para enseñarlo. No se trata de enseñar ajedrez para que sean campeones del mundo, sino para que les ayuden en otras facetas que les pueden ser necesarias y les beneficien en sus estudios.
-¿Cómo está la implantación del ajedrez en los colegios asturianos?
-Todos los colegios asturianos convocan clases de ajedrez. En Gijón, en Avilés y en Oviedo hay actividades ajedrecísticas. Nosotros hemos tratado de aportar el capital humano.
-¿Quiénes son ahora mismo los mejores jugadores asturianos?
-Tenemos a dos Maestros Internacionales: Alberto Andrés González y Marcos Llaneza. Marcos está dando ahora clases en China. Tenemos varios maestros FIDE. Nuestro objetivo es tener en el futuro algún Gran Maestro, pero es muy difícil llegar a eso.
-¿Y quién es la gran promesa?
-Tenemos a Jonás Prado Lobo, que es campeón de España sub 10. Tratamos de que la gente salga adelante desde la base. Y para ello, junto con la dirección general de Deportes, organizamos los torneos escolares. Antiguamente teníamos el torneo Román Torán, pero ahora no hay dinero para llevarlo a cabo y nos centramos en el torneo escolar.
-¿Cómo se otorgan esos títulos de Gran Maestro y todos los demás que hay en el ajedrez?
-Por el ELO que se tiene. Para ser Maestro FIDE hay que haber tenido un ELO de 2.300 alguna vez. Si lo tienes solicitas el título y te lo conceden previo pago. Para ser Maestro Internacional hay que haber tenido un ELO de 2.400 alguna vez y haber conseguido tres normas (una determinada clasificación) en torneos que estén amparados por la FIDE (Federación Internacional de Ajedrez). Para ser Gran Maestro tienes que haber alcanzado un ELO de 2.500 y haber conseguido también tres normas de Gran Maestro en ciertos torneos.
-¿Cómo entra la gente en el mundo del ajedrez?
-En mi caso simplemente fue el enfrentamiento por el titulo mundial entre Bobby Fischer y Boris Spassky . Yo tenía entonces 15 años y fue lo que me motivó. Hoy por hoy suelen engancharse los niños desde el colegio y a través de las actividades que hacen los clubes, que realizan una gran labor para tratar de captar a los pequeños talentos que salen de los colegios.
-¿Por qué el ajedrez no tiene más repercusión?
-Quizás porque el ajedrez te lleva a preguntarte cosas y quizás eso no interese. Del ajedrez viven 50 jugadores en todo el mundo. Es un juego minoritario. Pero es visualizable y no sé por qué la gente no se pone delante de la televisión para ver una partida de ajedrez.
-¿Ha matado la informática al ajedrez?
-Conozco jugadores que dicen que con los ordenadores se acabó el ajedrez y otros que piensan lo contrario, que te abre dimensiones distintas. Nakamura (un gran jugadores estadounidense) dice que se está replanteando todas las teorías de las aperturas gracias a los ordenadores.
-¿Se puede ganar hoy en día a una computadora?
-Es complicado, pero evidentemente el ser humano tiene una visión no regida por el cálculo. Lo que pasa es que los ordenadores pueden penetrar 30 jugadas en una posición. Y no solo eso. Los ordenadores tienen acceso a bases de datos que les permiten comparar posiciones. Pero siempre está el ingenio humano.
-¿Cómo está viendo el Mundial entre Carlsen y Anand?
-Para mi Carlsen siempre fue el mejor. El número 1. Fijate en el diferencial de ELO entre Anand y Carlsen (casi 100 puntos). Había un handicap psicológico para Carlsen y es que él era un admirador de Anand. Le ha conseguido ganar y creo que ha dado el salto. Me parece que el indio Anand tiene el Mundial perdido.
-¿Dominará Carlsen el ajedrez durante muchos años?
-Sin duda. En mi opinión va a superar a Kasparov. Está claro que es un genio. Hemos pasado mucho tiempo buscando a un jugador que le haga sombra a los rusos, como en su día Fischer, y ahora hay un noruego que se los está comiendo y los rusos no aportan nada nuevo.
Esperando al Carlsen asturiano
La mejor manera de popularizar el ajedrez es introducirlo en los colegios y desde allí reclutar a los que tengan virtudes para ser grandes campeones. En Asturias, desde la Federación, tratan de popularizar el deporte que más hace trabajar a la inteligencia desde los colegios. La idea no es que se conviertan en jugadores profesionales, sino que el ajedrez les ayude en su vida. Ahora bien, desde los clubes se trata de dar instrumentos a los jóvenes con talento para que puedan potenciarlo. Y que si el próximo Magnus Carlsen nace en Asturias pueda llegar tan lejos como lo está haciendo el noruego.
Fuente: La Nueva España